No
resulta fácil seguir el rastro a numerosas fuentes y monumentos de Madrid que
han sufrido traslados sucesivos, a veces no justificados. El Parque de María Eva
Duarte de Perón está situado en el límite oriental del Ensanche de Madrid, entre
las calles Francisco Silvela, Florestán Aguilar y Doctor Gómez Ulla y la plaza
de Manuel Becerra. Se creó a mediados del siglo pasado, después de la
famosa visita de Evita a España en 1947. Sin embargo cuenta con
una fuente más antigua, que refrescó antaño el paseo de las Delicias, como podemos ver
en un cuadro de Casimiro Sainz. Por sus características parece una obra barroca de la
segunda mitad del siglo XVIII, que recuerda a otras fuentes de la época y que
corresponde con el tiempo del trazado del paseo suburbano.
Casimiro Sainz. Fuente en el Paseo de las Delicias. 1875. Museo de Historia, Madrid |
En 1913,
cuando ya el paseo de las Delicias estaba plenamente integrado en la ciudad y se
había convertido en una importante arteria para el tránsito rodado, la fuente se
trasladó a la plaza de Nicolás Salmerón, luego llamada de Cascorro, abierta tras
el derribo de una manzana conocida como “el tapón del Rastro”. En fotos de la
época podemos comprobar que la fuente contaba con un pilón de piedra más alto que
el que presenta en la actualidad, posiblemente el mismo que el que tenia
cuando estaba en el paseo de las Delicias.
L. Huidobro. Fuente de la Plaza de Cascorro. 1922. Museo de Historia, Madrid |
Además del
pilón también ha desaparecido en la fuente actual el remate sobre el cesto de
frutas que corona la composición. También ha variado la disposición de los
surtidores, como podemos comprobar si comparamos las fotografías antigua y actual.
Lo más característico de la estructura lo encontramos en las dos grandes conchas invertidas,
separadas por sendos mascarones y sobre las que se alza un pináculo de planta
octagonal que corona el citado cesto de frutas.
La fuente en su ubicación actual en el centro del Parque de Eva Perón |
La inclusión de
la fuente barroca en el parque no tiene mucho sentido desde el punto de vista
histórico no responde a ningún criterio compositivo o estético razonable,
pero es indudable que ofrece al visitante un elemento de interés.
No hay comentarios:
Publicar un comentario